Saltar al contenido

Las mejores tablas de panchar

Lo más común es estar horas, días y semanas eligiendo una buena plancha, que con vapor, que con rociador, con una cosa, la otra, etc.

¿La tabla? Da igual compramos cualquiera por ahí y ya está, una bien económica sencillita y listo. Error, luego vienen los problemas. “No se apoya bien y baila”, “la funda no ha durado nada”, “me duele la espalda con esta tabla”, etc.

No se trata de simples “tablas”, sino de verdaderas aliadas que pueden facilitarnos la tarea. Los expertos han elegido algunas de ellas para orientarnos y se han decantado porque la favorita sea la  Whitmor.

¿Por qué una tabla de planchar?

Planchar no es una actividad que a todos nos deleite, es más, muchos de nosotros lo hacemos más por obligación que por placer.

Ir de punta en blanco nos gusta, pero en muchos casos debemos tener una cierta presencia,  imagínense que carta de presentación, si al llegar al trabajo tenemos la camisa o la falda arrugada.

Pero no todo es penar o una obligación, en invierno no hay nada mejor como ponerse una camiseta o el pijama calentito recién planchado; incluso hay quiénes planchan las toallas y si bien es un trabajo extra, quedan increíblemente suaves.

Tanto como si vamos a estar un rato con la plancha o toda una tarde, nada mejor que hacernos con una buena tabla de planchado. Siempre es más común prestar mucha atención a la compra de la plancha, y cuando llega el momento de la tabla, recurrir a comprar cualquiera por ahí.

Si pensamos la tabla como nuestra base de trabajo mientras planchamos, quizás empecemos a cambiar un poco de idea. Tanto como la plancha, puede hacernos la tarea mucho más sencilla y llevadera; incluso evitar dolores de espalda o de brazos, que suelen aparecer cuando estamos mucho tiempo planchando.

Muchas de ellas incluso vienen con múltiples accesorios, facilitándonos la tarea y convirtiéndose en verdaderas ayudantes al momento del planchado.

A tener en cuenta

El espacio que ocupará la tabla. Si tenemos en nuestra casa un espacio dedicado a hacer la colada, podemos optar por una mesa rebatible, que permite múltiples espacios de almacenaje, pero que ocupa un buen lugar. Si el espacio para hacer la colada no es tan grande, otra opción son las tablas que van sujetas a la pared y cuya ventaja es que al ser plegables no ocupan tanto espacio.

Las más comunes son las tablas de pie plegables, porque permiten versatilidad en su guardado, desde dentro de un armario o colgadas en la parte trasera de alguna puerta. También existen tablas de mesa, cuyas patas de apoyo son mucho más cortas y por lo tanto ocupan un espacio mucho menor al plegarse y guardarse.

No todas tienen el mismo largo. Por ejemplo las tablas de mesa suelen ser mucho más cortas que las de pie, y si tenemos que planchar pantalones o vestidos largos, las primeras no resultan ser muy cómodas. Tenemos que pensar que vamos a planchar y en función de eso, determinar el largo de la tabla. En general las medidas suelen ser entre unos 120 a 140 cm de largo.

Tampoco el ancho es el mismo, pudiendo variar de unos 30 a 45 o incluso los 52 cm. Ante la duda, siempre es mejor una tabla ancha, permitirá mayor superficie de planchado, y hará que nos cansemos menos, puesto que no será necesario ir y venir tantas veces con la plancha.

La altura es fundamental, sobre todo porque solemos planchar de pie y las malas posturas, producto de no ajustar la altura de la plancha pueden ocasionarnos grandes dolores de espalda. De hecho, si es regulable para adaptarse a nuestra altura y posición de brazos, mucho mejor, porque nos permitirá incluso poder planchar sentados en un banco alto o una silla, que es lo que suelen recomendar los especialistas. Además, si en casa vamos a usar la tabla más de una persona, esta característica es imprescindible. Para que tengamos un parámetro, la altura suele regularse entre unos 70 a 90 cm, siempre tomando como referencia que nuestra espalda debe estar recta y no echados sobre la tabla.

La estabilidad. Que la tabla se mueva mientras planchamos es incómodo y seguramente la ropa se lleve más de una arruga de regalo al pasar la plancha. Para evitarnos el mal trago, la estabilidad de la tabla estará asociada a su base de apoyo y su estructura. Las más firmes, son aquellas con estructura de madera o acero, pero claro que suelen ser mucho más costosas. Un tabla con una base de apoyo en dónde sus patas formen una “T”, no será tan firme como una de 4 patas; tenga la forma que tenga lo aconsejable es que en la parte inferior de las patas cuente con unos tacos para evitar cualquier deslizamiento y aumentar la estabilidad.

Las tablas tienen un cierto peso. Si no tenemos un espacio fijo de planchado, es muy probable que guardemos la tabla en un sitio diferente al que planchamos, y por más que la distancia a recorrer sean unos pocos metros, lo ideal es que la tabla no sea tan pesada. Eso sí, cuánto más liviana, menos estabilidad a la estructura ofrecerá, con lo cual aquí debemos sopesar que nos conviene más.

Las fundas de las tablas, dependiendo la marca, pueden ser buenas o que quizás en poco tiempo pensemos en recambiarlas. Incluso, las fundas son todo un mundo aparte: ignífugas, transpirables, algunas que reflejan el calor mejor que otras, muchas hacen que la prenda se adhiera mejor facilitando el planchado, algunas son lo suficiente impermeables como para soportar grandes descargas de vapor, etc.

Sea cual sea la funda, lo mejor es que sea extraíble; para que podamos lavarla cuando lo consideremos necesario y cambiarla cuando este en mal estado.Pueden estar fabricadas en algodón, siendo las ideales, o en algún material sintético.

El acolchado o almohadilla, se encuentra entre la tabla y la funda. Su función principal es amortiguar la plancha sobre la prenda, facilitar el deslizamiento de la plancha y proteger la tabla de la humedad del vapor de planchado. Lo ideal es que la tabla cuente con una almohadilla de 1 a 1,5 cm.

Dependiendo el modelo de tabla podemos encontrar accesorios extras, algunos vienen incluidos, pero en cambio otros debemos adquirirlos aparte. Tanto de una manera como de otra, lo importante es que la tabla de planchar tenga la suficiente versatilidad como para permitirnos el accesorio que mejor se adapte a nuestro planchado. Algunos de ellos son: un soporte para las mangas, soporte para la plancha, ganchos o bandejas para la ropa recién planchada, etc.

Además de los accesorios, algunas tablas tienen particularidades que las diferencian de otras, como un ala abatible para el planchado de la zona de los hombros, pueden girar 360º y evitar así que demos vuelta la prenda, otras en cambio traen un toma que sirve de alargue, bloqueo infantil para evitar que se caiga o desajuste accidentalmente, etc.

El favorito: Whitmor

Una marca orientada a la organización del hogar, siendo fiel reflejo de ello el diseño de esta tabla de planchar práctica y cómoda, ideal para espacios pequeños.

A pesar de su reducido tamaño nos ofrece una superficie cómoda de planchado de unos 72 x 30 cm, si bien es un poco más estrecha que las tablas convencionales, no tendremos inconveniente en planchar camisas, pantalones o vestidos en uno o dos pasos dependiendo la prenda.

No cuenta con altura regulable, pero al apoyarse sobre cualquier superficie nos brinda dos principales ventajas. La primera es que al colocarla sobre cualquier mesa convencional, nos asegura que mientras planchemos nuestra posición sea totalmente erguida, no como sucede muchas veces que planchamos casi echados sobre la tabla.

La segunda es que en cualquier superficie dónde se apoye, nos ofrecerá la propia estabilidad de esa superficie. Por ejemplo, si nos gusta la estabilidad de la mesa del salón, podremos apoyar la tabla sobre la mesa y nos aseguraremos de que se mantendrá quieta mientras pasamos la plancha sobre ella.

Sus dos patas nos ofrecen total estabilidad en su parte delantera y en su parte trasera, a diferencia de otras tablas que esto se reduce a cuatro puntos de apoyo, uno por cada pata. Además, cuenta con cuatro protectores antideslizantes que no solo evitan que la tabla se escurra, sino que cuidan las superficies dónde se apoye la tabla evitando arañazos o marcas.

Algunos expertos han colocado la tabla sobre la cama o en mesas como la de la cocina, es decir en superficies blandas o con poco espacio, y aun así han notado que la tabla se mantiene en cada pasada de la plancha.

La base es una estructura metálica, que por una parte evita que la humedad del calor de la plancha quede atrapada en la funda y se transmita a la prenda; y por otra ayuda a que el calor se distribuya homogéneamente por toda la superficie ayudando así a que se quiten las arrugas.

La funda acolchada de espuma amortigua el planchado y nos facilita el trabajo con las arrugas difíciles, está recubierta con una tela de algodón que ayuda a absorber el calor y evita que la prenda resbale mientras pasamos la plancha sobre ella. Lo que si debemos tener en cuenta, es que una funda de algodón es un poco más frágil que una sintética, así que cuidado con la excesiva fuerza al presionar y deslizar la plancha por la tabla.

Su dos patas se pliegan y trae un gancho retráctil incorporado similar al de una percha, que nos permite colgarla de cualquier lugar incluso dentro del armario.

Otras opciones

Metaltex Antares

Desde el año 1945, Metaltex es una marca que pone todos sus esfuerzos en darnos una mano en la organización de la casa. Lo que comenzó siendo una empresa que diseñaba a partir del alambre de acero plastificado, hoy en día es una compañía que nos brinda objetos como la tabla de planchar Antares.

Con una amplia superficie de planchado de 114 x 38 cm, nos permite planchar con facilidad un largo de pierna del pantalón o incluso un lado completo de la playera.

Las patas de apoyo son cuatro tubos de  22 mm de diámetro en forma en “T”, lo suficientemente gruesos como para sostener la base de la tabla en 4 puntos de apoyo y que cada presión que ejerzamos con la plancha sobre ella, se traslade a las 4 patas de apoyo del suelo, ofreciéndonos buena estabilidad y equilibrio al planchar. En los extremos de las patas trae una goma que ayuda a que la tabla no resbale manteniéndose firme y apoyada.

Otra ventaja de las patas en forma de “T” es que permiten plegarse de forma sencilla y ocupando el menor espacio posible, aunque aquí los expertos echan en falta algún sistema que asegure las patas y que evite que la tabla se abra una vez plegada.

Su altura regulable de 53 a 89 cm, nos permite planchar erguidos de acuerdo nuestra propia altura y evitar cualquier molestia en la espalda. Algunos expertos se valen de un banco para poder planchar más cómodos y adaptan la tabla su medida de 53 cm.

La base de la tabla es una rejilla que permite el paso del calor y del vapor, evitando que la ropa se humedezca durante el planchado. Los expertos han notado que la funda no es del todo acolchada, más si la compráramos con otras fundas estupendas que tiene disponibles la marca, pero debemos hacernos con ellas en otra compra.

El reposa plancha laminado nos permite colocar una plancha o un centro de planchado; la abertura central permite colocar la plancha inclinada tanto de un lado u otro de la tabla, tiene unos pequeños topes que evitan que el material pueda rayar la base de la plancha. El aro de metal en la base forma un perímetro que sobresale hacia arriba y cuya función es asegurar que el centro de planchado quede encajado para que no exista riesgo de que se caiga durante su uso.

Como accesorio extra tiene incorporada una rejilla en la que podemos colocar la ropa una vez que la tengamos ya planchada.

Vileda Tabla Smart

Si tenemos poco espacio la tabla Vileda es una muy buena opción de compra; también al ser una tabla simple y sencilla es ideal si no planchamos con mucha frecuencia.

Su superficie de planchado es de 114 x 34 cm, quizás algunas prendas muy largas o muy anchas debamos plancharlas en varios pasos, pero es lo que toca si buscamos ahorrar espacio. Tengamos en cuenta que al plegarla, la altura de la tabla es de 132 cm, cabe sin problema en cualquier armario pero es importante conocer esta medida de antemano, más si lo que no nos sobra es espacio.

Su altura es ajustable desde 76 a 95 cm. Es muy ligera, esa solo 3kg, pero esto también tiene sus desventajas. Por ejemplo, soporta 10 kg de peso siendo más que suficiente, pero cuidado con aplicar demasiada presión al planchar.

También hay que tener en cuenta que sus patas son mucho más delgadas que en otras planchas e incluso las gomas que llevan para evitar que la tabla se deslice son mucho más pequeñas y de menor grosor. Esto no quiere decir que la tabla sea endeble, sino que al presionar o mover la plancha debemos tener cuidado de que la fuerza no sea excesiva, porque quizás con otros modelos no notemos que al aplicar demasiada fuerza la tabla se mueva, pero con la Vileda sí.

De forma similar a las tablas anteriores, su funda de algodón es transpirable y la base de la tabla es una rejilla que ayuda a que el vapor y el calor no queden atrapados en las prendas y se libere con facilidad.

La desventaja es que la base de apoyo de la plancha no es cerrada completamente y al apoyarla debemos cerciorarnos de que la plancha quede bien apoyada; además debido a su menor tamaño, no es una base apta para centros de planchado.

Honey-Can-Do

Esta tabla de planchar es perfecta para los que no disponen de mucho espacio en sus domicilios. Tiene un sistema de plegado que permite cerrarla de forma que se puede guardar casi en cualquier sitio porque se puede doblar por la mitad. Así que es muy funcional. Además tiene una gran relación calidad-precio.

Los especialistas creen que la tela superior de la tabla es un poco fina por lo que recomiendan añadirle una funda algo más gruesa para que tenga mayor durabilidad. Las patas de la tabla son de hierro por lo que es bastante estable a la hora de planchar. Tiene garantía de por vida.

Leifheit Air Active

Si pensaban que una tabla de planchar no podía ser tecnológica, estaban equivocados. La Leifheit cuenta con un sistema “Air Active” que hace que la funda se infle y desinfle, para aumentar o disminuir el grosor de la superficie de planchado.

¿Cuál es la ventaja? Poder tener la superficie que mejor se adapte al tipo de tejido que vayamos a planchar. Los tejidos más gruesos necesitarán de superficies más acolchadas para que al presionar la plancha sobre la prenda logremos quitar todas las arrugas de forma más sencilla; los tejidos más finos, necesitan superficies menos acolchadas puesto que no requieren tanta fuerza en el planchado, además apoyar un tejido fino en una base muy acolchada facilita que el tejido se hunda y arrugue, es como pretender planchar una seda sobre un sofá.

La desventaja es que no es una tabla de las que cuentan con una gran superficie de planchado, siendo apenas un poco más amplia que la Vileda, de unos 118 x 38 cm. La altura regulable, en cambio tiene un poco más de juego que en el resto de las tablas, siendo de 75 a 100 cm.

Sus patas en forma de “T” cuentan con un doble par de caños gruesos por cada pata, solo que la distancia entre los pares de caños está más separada, ofreciendo cuatro puntos de mejor estabilidad en la base de planchado.

El soporte para plancha es mucho más grande que en los otros modelos, pudiendo colocar cualquier centro de planchado y obviamente cualquier plancha. Como accesorio extra, cuenta con sujeta cables para evitar que el cable nos arrugue la ropa y entorpezca el planchado.

Última actualización el 2024-02-29 at 13:23 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados